There is no place like home, when you've got no place to go.

8/4/12

                            "Siguió animándolo mientras regresaban al castillo, y cuando llegaron al segundo piso Ron parecía un poco más alegre. Sin embargo, cuando Harry apartó el tapiz para tomar el atajo por el que solían ir a la torre Gryffindor, los dos amigos encontraron a Dean y Ginny abrazados y besándose apasionadamente, como si los hubieran pegado con cola.
                            Harry sintió que algo enorme y con escamas cobraba vida en su estómago y le arañaba las entrañas; fue como si un chorro de sangre muy caliente le inundara el cerebro, le borrara todos los pensamientops y los sustituyera por un acuciante impulso de hacerle un embrujo a Dean y convertirlo en jalea. Mientras se debatía con esa repentina locura, oyó la voz de Ron, aunque le sonó como si su amigo estuviese muy lejos de allí."

7/4/12

Mientras salía a tomar un decanso de mi lectura de Harry Potter, miré por la ventana, justo en ese momento.. En esa calle, la calle dónde estaba la plaza, radiante de un color verde, con las nubes grises cubriendola. El auto pasó rápido, por lo qué no pude prestar mucha atención, pero ahí estaba, ahí estaba la prueba que me decía que aun no podía sacarlo. Sin pensarlo dos veces, retomé el párrafo, aún no sé si lo leí o si observé las letras mientras pensaba en otra cosa. Evidentemente no había podido volver a percatarme de lo que estaba sucediendo dentro de Hogwarts, mi mente estaba en otro lado, estaba en ese lugar, en ese momento, en ese instante en el qué mis ojos lo vieron. En ese instante, un chorro de sangre caliente recorrió desde la punta de mis pies hasta mi cabeza, por lo menos durante 1 minuto estuve pensando, una y otra vez, en por qué tuve que levantar la cabeza justo ahí. Exactamente ahí. A ver ponete a pensar, y no hablo en tercera persona, te hablo a vos, lector, decime, si estuvieras en mi situación, no te darían ganas de agarrar y meter todo en un cohete como los que el Coyote ponía como trampa al Correcamino, prender fuego la mechita, y listo, ver satisfactoriamente como todo se desvanece. Pero no, porque estaba durmiendo, si, ese sentimiento estaba durmiendo, ahora porqué, en la vuelta de un viaje, tiene que pasar algo que lo despierte, no sé.