Abrázame y subime a la cama.
Acostate conmigo, no quiero perder ni un segundo.
Rodeame con tu brazo derecho y dejame apoyar mi cabeza en tu pecho.
Apaguemos la luz, cerremos los ojos, y vivamos eternamente en ese momento.
Porque en ese momento no importa lo que pasó.
En ese momento no importa nada más que nosotros.
Porque ese momento tan corto es a su vez infinito.
Porque te amo, y te quiero amar para siempre.
Y te quiero amar en ese momento.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario